Cómo la autodisciplina puede mejorar tu vida
La ciencia nos ha confirmado que tanto la felicidad, como el éxito en la vida dependen en gran medida de nuestros hábitos y de las cosas que hacemos todos los días. Es decir, de la autodisciplina. Alguna vez leí la siguiente idea:
“La gente exitosa hace consistentemente lo que otros hacen ocasionalmente”.
Craig Groeschel
No basta con hacer las cosas una vez o con hacerlas de vez en cuando porque construir una “buena vida” como le dicen en la Psicología Positiva, es el resultado de una combinación de sabiduría, congruencia y virtud, entre otras cosas. Tener una vida de la cual puedas sentirte orgulloso y satisfecho, no depende sólo de las cosas que haces, si no de la frecuencia y el compromiso con las que las haces. Esto siempre va a reflejar tu orden interior.
“Primero nosotros definimos nuestros hábitos y luego son nuestros hábitos los que nos definen a nosotros”.
John Dryden
Si no estás obteniendo los resultados que deseas en alguna área de tu vida -salud, relaciones, carrera, familia o finanzas-, puede ser que estés haciendo lo correcto, pero tal vez no con la consistencia que te permitirá lograr una diferencia.
Escribe tu curriculum de vida con esfuerzos sostenidos
Cuando tratamos de lograr un cambio en nuestra vida debemos pensar a largo plazo, ya que nada valioso se logra sin un esfuerzo continuo. Esto es tener autodisciplina, aunque cambiar nuestros hábitos sea difícil. Generalmente intentamos las cosas un par de veces y después desistimos porque las estrategias -una nueva dieta, una nueva rutina de ejercicio, una nueva manera de organizar los pendientes-, no nos “funcionaron”.
Los cambios son procesos que llevan tiempo y repetición, si realmente quieres desarrollar un nuevo comportamiento o crear un nuevo hábito necesitas comprometerte a hacerlo por un periodo de tiempo continuo. Algunos expertos dicen que se necesitan 21 días seguidos de repetición, otros sugieren de 60 a 90 días dependiendo del hábito. Sin embargo, es generalmente hasta después de aproximadamente 3 meses que puedes comenzar a ver los resultados y decidir si está funcionando o no. Después de este periodo puedes estrechar tus metas hasta 6 meses o 1 año.
Cuando elaboras tu curriculum profesional o analizas el de alguien más, inmediatamente te llaman la atención los trabajos que hayan abarcado un periodo menor a un año. ¿Por qué? Porque en circunstancias normales usualmente este dato es un buen indicador y predictor de la formalidad y compromiso de las personas.
El poder del año
De la misma manera al proponerte cualquier proyecto, lo que más va a sumar a tu sentido del logro es lo que puedas sostener por periodos de 1 año. No es lo mismo decir: “llevo algunos meses sin fumar”, a decir, “cumplí 1 año de dejar el vicio”; “llevo unos meses haciendo ejercicio”, a “llevo 1 año nadando 2 veces por semana”.
El poder del año es enorme en la autodisciplina. Realmente te hace sentir diferente y es un buen indicador del éxito a nivel personal y profesional. No sólo influye en la percepción de la gente que te rodea. Su influencia trasciende en tu identidad y en tu autoconcepto, generando un fuerte efecto en tu confianza y en el sentido de competencia que te permite perseguir retos cada vez mayores.
Formas de fortalecer la autodisciplina
Fortalecer tu autodisciplina te brindará el poder de transformar tu vida al permitirte concentrar tu energía y tu atención en las cosas que realmente son importantes para el desarrollo de tu potencial y para tu realización personal.
Puedes hacerlo de 3 formas:
1. Con perseverancia
Significa aplicar un esfuerzo recurrente el número de veces que sea necesario hasta lograr los resultados que buscamos. Los atletas y los músicos son un claro ejemplo de esta cualidad.
2. Desarrollando la habilidad de resistir distracciones y tentaciones
Piensa que tanto las pruebas pequeñas (como resistir un antojo y comer algo saludable en su lugar, o leer en vez de ver televisión), hasta las pruebas más grandes (como correr un maratón, o terminar un curso), te ayudarán a templar tu fuerza de voluntad para los mayores retos que afrontarás a lo largo de tu vida.
3. No rendirse, clave para la autodisciplina
A pesar de no ver los resultados pronto, a pesar de los fracasos y los retrocesos; la capacidad de volver a ponerse en pie y de conservar la presencia de “espíritu” es crucial para construir el éxito.
Nuestra fuerza de voluntad es un recurso limitado, por eso la perseverancia en conjunto con los hábitos y los sistemas nos ayudan a mantener los esfuerzos sostenidos a largo plazo que te permiten lograr grandes resultados.
“El poder de la disciplina te ayuda a hacer lo que se tiene que hacer, cuando se tiene que hacer, independientemente de que lo quieras o no hacer”
Brian Tracy
A corto plazo el desarrollo de la autodisciplina genera resistencia e incomodidad, y hasta un poco de ansiedad (es normal cuando se sale de una zona de confort y se busca el crecimiento). Sin embargo, a largo plazo, nada se comparará con el orgullo y la felicidad que se alcanzan al cumplir las metas que te propusiste.
Después de todo, como dice Jim Rohn: “En la vida constantemente tendrás que elegir entre cargar con dos tipos de dolores: el dolor de la disciplina o el dolor del arrepentimiento. La diferencia es que el dolor de la disciplina pesa kilogramos y el dolor del arrepentimiento pesa toneladas”.
Fuentes:
-The power of Discipline -Brian Tracy (resumen de Alex Umole)
-Will Power and Self-Discipline-Remez Sasson
